- Posicionar a Chile en esta región del mundo, ampliar nuestro intercambio comercial e incrementar las inversiones fueron los principales desafíos como embajador de Chile en Abu Dhabi.
Hace algunos días, el jeque Khalifa bin Zayed Al Nahyan, presidente de Emiratos Árabes Unidos (EAU), concedió a Jorge Daccarett, la Orden de Independencia de Primera Clase con motivo de la culminación de su etapa en el país del Golfo. Este reconocimiento fue entregado por la ministra de estado de Cooperación Internacional y directora general de Expo 2020 Dubái, Reem Bint Ibrahim Al-Hashimy. Tras recibir la distinción, Jorge Daccarett manifestó al Correo del Golfo que se siente «honrado de recibir esta condecoración. Emiratos Árabes nos ha demostrado que, con visión y liderazgo, es posible lograr la estabilidad que conlleva a la paz y al desarrollo de las naciones. Fue un privilegio haber llegado en el Año de Zayed, el líder fundacional, y partir celebrando el cincuentenario y coincidir con la finalización de una exitosa Expo Dubái«, afirmó.
Jorge Daccarett junto al Sheikh Abdullah, príncipe canciller en el pabellón de Chile.
Ya en Chile, Jorge Daccarett conversó con Aldamir sobre lo que fue esta misión diplomáticos y sus desafíos futuros.
- ¿Cuáles fueron tus principales logros como embajador en los Emiratos Árabes Unidos (EAU)?
En lo político, hicimos el primer ejercicio de Consultas Políticas con EAU. En lo económico, logramos firmar varios acuerdos con EAU, en particular dejamos iniciadas las conversaciones para un Acuerdo Integral Económico (una especie de Tratado de Libre Comercio), que sería el primero de Chile con el Mundo Árabe y el primero de EAU con América Latina. Finalmente, sacamos adelante el pabellón chileno en Expo Dubái, que fue muy exitoso ya que trajimos a varias pymes nacionales y les gestionamos reuniones productivas.
- En este balance, ¿qué faltó por hacer?
Avanzar más en la relación con Kuwait, Qatar y Arabia Saudita, ya que por la pandemia no fue posible viajar a estas concurrencias con la frecuencia que me hubiera gustado. Sin embargo, al final de mi período logramos reactivar estas relaciones.
- ¿Cuáles fueron las principales dificultades que surgieron en tu labor como embajador?
La pandemia fue una dificultad para todo el mundo, pero logramos mirar el vaso medio lleno y fue posible organizar reuniones virtuales a nivel ministerial y con las concurrencias que, de otra forma, no se hubieran logrado. Además, logramos sacar adelante una EXPO con un presupuesto sustancialmente inferior a lo que habían sido tradicionalmente las Expos para Chile.
- A nivel personal, ¿cómo fue vivir a allá, alejado de la familia, con una cultura distinta a la nuestra?
Bueno, estar lejos de la familia siempre es difícil, pero afortunadamente hoy la tecnología ayuda y es posible hablar con cámara, aunque obvio que no siempre reemplaza el estar ahí.
La cultura, si bien es distinta, no lo es tanto para nosotros como descendientes de árabes. A mi me criaron muy árabe desde chico, y mi círculo de amigos acá eran palestinos, sirios y libaneses, por lo que me sentía muy cómodo con la música, la comida y las costumbres. El hecho de hablar y leer árabe también ayudó mucho a no sentirme tan extranjero.
- ¿Qué vas a echar de menos?
La diversidad cultural, acá está lleno de indios, pakistaníes y filipinos. También la calidad de servicio, el orden y la seguridad, pero sobre todo la alegría de la gente, ya que las personas viven felices y son corteses con los demás. También echaré de menos la cultura árabe, y la geografía de este país: sus montañas, playas y desierto, conversar con la gente de los pueblitos, andar en bicicleta en el desierto y en kayak por los manglares al atardecer.
- ¿Qué proyectos tienes volviendo a Chile?
Pienso retomar mi consultora ChileArab para ser un puente de negocios e inversiones entre Chile y el resto de Latinoamérica con los países del Golfo. Hay mucho interés por Latinoamérica, en cuanto a seguridad alimentaria y energías renovables, quieren entrar en proyectos asociados con el sector privado pero no conocen a las familias, y necesitan que alguien de su confianza los guíe y les presente gente no sólo en Chile pero también en el resto de América.
Paulina Yarur Chamy