- En la actual ley solo se pueden realizar aportes a organizaciones con una de estas tres finalidades: superación de la pobreza, desarrollo de ciencia y fomento al arte. Con la nueva norma, se fijan 20 propósitos de donación, lo que amplía el abanico de posibilidades y de fomento a la sociedad civil.
El Congreso aprobó y despachó al Ejecutivo la nueva Ley de Donaciones, que trae una serie de cambios para incentivar el financiamiento y la participación de privados en organizaciones sociales sin fines de lucro, como es el caso de Fundación Belén 2000. Además, un dato claves es que los contribuyentes podrán deducir el monto de la donación de la base imponible de los impuestos de primera categoría, único de segunda categoría, global complementario o impuesto adicional.
Es por eso que conversamos con el abogado Roberto Peralta, quien nos explicó detalladamente la importancia de la vigencia de esta nueva Ley de Donaciones. “Son varias las leyes las que regulan las donaciones desde lo contractual hasta lo tributario. En todo caso, y haciendo una breve explicación, el estatuto básico está en los artículos 1386 y siguientes del Código Civil, el impuesto general a las donaciones (con algunas exenciones) está en la Ley Nº 16.271 y aproximadamente 27 leyes establecen beneficios tributarios a las donaciones, las cuales consisten en exención al impuesto a las donaciones y trámite de insinuación, rebaja como gasto de la renta imponible y/o crédito tributario. De estas 27 leyes, las más relevantes son la Ley de Donaciones de Beneficio Público (Ley Nº 21.440 que incorpora los Arts. 46 A-K al Decreto Ley Nº 3063 de 1979), Ley de Donaciones con Fines Culturales (Art. 8º Ley Nº 18.985), Ley de Donaciones con Fines Sociales (Ley Nº 19.885) y la norma especial de la Ley de Rentas Municipales (Art. 46 del Decreto Ley Nº 3063 de 1979)”, explica el abogado.
Al respecto, la senadora de la República Ximena Rincón nos comparte: “Queremos agradecer al Ministro Mario Marcel que nos haya escuchado con las organizaciones que hoy se dedican de la sociedad civil a ayudar a la solidaridad, a sacar adelante distintas iniciativas. Trabajamos arduamente por la Ley de Donaciones durante todo el año 2021 y comienzos del 2022. Es una buena noticia que el ministro haya acogido y así poder armar una mesa de trabajo, ojalá esto permita no solo poder aplicar la ley de donaciones que ya se legisló, sino que en la reforma tributaria se hagan las adecuaciones que sean necesarias, pero no aquellas que signifiquen un retroceso”.
En relación a cómo esta nueva normativa beneficia a Fundación Belén 2000, Roberto nos cuenta, “Dado que la Fundación Belén realiza programas en Chile en beneficio de personas de escasos recursos, no tuvo inconvenientes para acogerse a la Ley de Donaciones con Fines Sociales y la norma especial de la Ley de Rentas Municipales. Luego, al entrar en vigencia el año 2022 la nueva Ley de Beneficio Público, la Fundación Belén se inscribió de inmediato, ya que bajo las dos leyes anteriores no se contemplaba explícitamente como finalidad la ayuda humanitaria en el extranjero”.
¿Cómo se llegó a este proceso?
R.: Los certificados bajo las dos primeras leyes de donaciones se lograron conforme a su estatuto vigente que ya existía. En el caso de la Ley de Beneficio Público, hubo que hacer todo un trabajo pre-legislativo para lograr su aprobación, ya que era una iniciativa que la sociedad civil venía proponiendo hace 20 años con escasos avances y no lograba plasmarse en una nueva legislación. La participación de la Fundación Belén fue crucial, ya que logró convencer sectores parlamentarios que históricamente habían estado reacios a iniciativas de este tipo, ya que sólo miraban la menor recaudación fiscal que podía significar una ley que da beneficios tributarios y no en el beneficio social de la donación.
Cuéntame acerca del apoyo de los senadores.
R.: El trabajo tanto con senadores como diputados fue impresionante, simplemente consistió en mostrarles toda la belleza que hay en el trabajo de fundaciones como Belén 2000 y muchas otras que constituyen un gran aporte a la humanidad. Fue una verdadera seducción con lo hermoso de la labor de la sociedad civil. El resultado de esto terminó siendo que la unanimidad de los senadores y diputados aprobaron el proyecto de Ley de Donaciones de Beneficio Público tan resistido en el pasado. Nadie votó en contra.
¿En qué benefició su apoyo?
R.: Fue crucial, ya que el entusiasta apoyo de un grupo inicial de senadores y diputados, fue contagiando al resto, lo cual permitió tener la nueva Ley de Beneficio Público aprobada y la certeza jurídica para los donantes de Fundación Belén 2000 que quieran ayudar a los niños de Palestina.
¿Qué puede ahora lograr la Fundación? ¿cuál es el antes y después?
R.: Con la nueva Ley de Donaciones de Beneficio Público dictada el 2022, la Fundación Belén 2000 puede recibir con mucha agilidad todo tipo de donaciones (dinero y especies) de empresas (con o sin renta líquida imponible, sociedad de inversión u operativa) y/o personas naturales, y darles como beneficio tributario la posibilidad de rebajar el total de la donación de su renta imponible hasta un límite anual de 20.000 UTM (empresas y sin superar el 5% de su base imponible, 0,48% de su capital propio tributario o 016% de su capital efectivo) o 10.000 UTM (personas y sin superar el 5% de su base imponible). Todo lo anterior, con la certeza que las donaciones recibidas pueden destinarse sin duda alguna a ayudar a los niños de Palestina y que al donante de buena fe nunca se le va a cuestionar el beneficio tributario, como lo señala expresamente la ley.
Por Paulina Latrach T.